Las infecciones por parásitos internos son muy comunes en nuestros animales de compañía. Se estima que > 40% de perros/gatos tienen parásitos, sin embargo, no todos presentan síntomas.
¿Cómo se contagian los perros por parásitos?
A través de la placenta cuando la madre está infectada
A través de la leche materna cuando la madre está infectada
Por contacto con haces de otros perros, en superficies, suelos, hierba, etc.
A través de vectores como p. ej. las pulgas, mosquitos, etc.
Ingiriendo presas infectadas (pequeños mamíferos, herbívoros, aves…)
Las formas inactivas de algunos de estos parásitos pueden perdurar durante largo tiempo en la intemperie por eso el solo hecho de que tu perro husmee entre la hierba por donde haya pasado otro perro es suficiente para el contagio. Además, algunos de ellos resisten a los desinfectantes más comunes.
¿Qué tipos de parásitos internos tienen los perros y gatos?
Intestinales:
Protozoos: Giardia spp, Toxoplasma spp, Cryptosporidium spp, Cystoisospora spp..
Cestodos: Dypilidium caninum, Ecchinococus spp, Taenia spp...
Nematodos: Toxocara spp, Trichuris vulpis, Uncinaria stenocephala, Anclyostoma spp..
Corazón: Dirofilaria immitis
Pulmonares: Aelurostrongylus abstrusus, Capillaria aerophila spp…
Tracto Urinario: Pearsonema feliscati, Pearsonema plica
Cada parásito tiene un ciclo distinto que va a influir en los síntomas que pueden causarles a nuestros animales. En ocasiones nos daremos cuenta al observar los parásitos presentes en las heces del animal.
¿Qué síntomas/signos tiene un perro con parásitos?
Vómitos y diarreas (a veces con sangre)
Prurito anal
Pérdida de peso
Abdomen distendido
Anemia
Cansancio
Tos
Tenesmo (esfuerzo al defecar)
Obstrucción intestinal
Según el tipo de parásito infectante los síntomas pueden variar desde completamente asintomáticos a todos los listados anteriormente. En ocasiones, si la infección es grave y no se trata, puede poner en peligro la vida del animal.
¿Cómo tratar los parásitos en un perro?
Existen múltiples productos en el mercado efectivos contra los parásitos internos para utilizar de forma regular. Es importante asegurarse de que los productos que utilices abarquen todos los parásitos presentes según tu zona geográfica y se adecuen al estilo de vida del animal.
Dependerá del producto la frecuencia con la que tenemos que desparasitar a nuestra mascota. Por norma general lo haremos con mayor frecuencia hasta los 6 meses de edad ya que en esa edad son más susceptibles a ser parasitados, ya sea por vía materna, por vivir en grupo o porque su olfato se está desarrollando y les gusta olisquear y tragarse todo lo que se les pone por delante.
A parte de lo evidente (mantendremos al animal en óptimo estado de salud) muchos de estos parásitos tienen potencial zoonótico. Es decir, pueden infectar a los humanos y en algunos casos pueden causar enfermedades graves como es el caso de la hidatidosis. De ahí la importancia de mantener a tu mascota adecuadamente desparasitada. ¡Y en especial si es de los que le gusta lamerte!
Y por último, es importante implementar medidas higiénicas adecuadas. Como hemos dicho, algunos de los parásitos comunes son muy resistentes en el ambiente y es clave mantener un protocolo de limpieza y desinfección adecuado para evitar contagio reincidente con restos de sus propias heces.
Si crees que tu mascota puede estar infectada o quieres consejo sobre cuál es el protocolo más adecuado según tu zona geográfica y estilo de vida del animal no dudes en ponerte en contacto con nosotros.